Seremos robots, lisa y llanamente.
Sin darnos cuenta, estamos siendo condicionados a creer que el hacer desaparecer progresivamente billetes y monedas hará todo más "eficiente" y nos dicen que el final del efectivo detendrá el fraude de seguridad social y la evasión de impuestos.
Pero la razón real es el control.
Si entrás en un negocio con una tarjeta de crédito y la computadora se niega a aceptarlo, bueno, por lo menos tenés otros medios de compra. ¿Pero qué ocurre cuando no hay efectivo y la computadora rechaza su tarjeta o microchip?
La computadora, y quien programa sus respuestas, controla qué y cuándo podés comprar.
Icke nos dice que algunos ingenieros electrónicos han advertido que en cuanto tenemos un microchip dentro de nosotros, se pueden pasar mensajes al microchip que pueden crear cólera, histeria y agresión masivas.
Seremos robots.
Es la pesadilla futurista que los libros de ciencia-ficción vienen anunciando desde hace tiempo.
Los experimentos con el uso de microchips ya están en operación alrededor del mundo. La tecnología existe y lo único que falta es manipular la mente humana para aceptarla.
Icke dice que en 1995 vió una nota en la BBC donde hablaban positivamente sobre un proyecto para insertar microchips a las personas con sus registros médicos.
Se presentó a una mujer con un microchip y el doctor llegó junto a ella con un lector de código de barras. Cuando dirigió este artilugio hacia la mujer, en la pantalla surgió su información médica.
En Argentina, sin ir más lejos, sería una buena idea promocionar los microchips como una manera certera de combatir la inseguridad cotidiana…
En algún momento, escucharemos muchas "justificaciones" para el uso de microchips, incluyendo el almacenaje de la información financiera para hacer las tarjetas de crédito obsoletas ("Podemos terminar el robo de tarjetas de crédito y el fraude"), y los medios de demostrar la identidad ("Ayudará terminar el crimen, quitar la necesidad de pasaportes, y detener la inmigración ilegal y el fraude a la seguridad social").
Todas estas afirmaciones y otras están diseñadas para manipular su mente con el fin de aceptar el microchip.
El microchip y la sociedad sin efectivo son parte de esa herramienta fundamental en el control de la existencia humana... el sistema financiero mundial.
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